Alejandro Rospigliosi, exjefe del Centro de Estudios Constitucionales del Parlamento, denunció que Jorge Torres Saravia, jefe de la Oficina Legal del Congreso, fue contratado a pesar de haber estado involucrado en una investigación pasada por violación. Rospigliosi cuestionó la designación y pidió la renuncia inmediata del presidente del Congreso, Eduardo Salhuana, señalando que esta acción es necesaria para garantizar la imparcialidad de las investigaciones.

“No se puede amparar a alguien investigado por hechos graves. Ahora toca garantizar la limpieza del proceso para dar con los responsables de lo sucedido”, enfatizó Rospigliosi, quien calificó la situación como “inaceptable” y exigió que se esclarezca cuántos trabajadores están implicados en la presunta red de prostitución que opera dentro del Parlamento.

Rospigliosi también recordó que Soto Salhuana, vinculado anteriormente a problemas judiciales cuando era alcalde, debería renunciar en este caso para preservar la transparencia. “Sin duda, hay una responsabilidad directa en quien lo designó como funcionario de la dirección del Congreso, pues no se puede tapar el sol con un dedo”, declaró.

Finalmente, se hizo un llamado urgente para tomar medidas contra este bochornoso incidente, que ha manchado la imagen del Congreso y exige acciones concretas para castigar a los responsables.