Foto: El Mundo

Las protestas contra la privatización de Machu Picchu continúan.

Y tal es la presión popular que la cuestionada ministra de Cultura, Leslie Urteaga, tuvo que salir a decir que evaluarán el fin del contrato con Joinnus.

Esta empresa es la encargada de la venta de boletos a la citada maravilla del mundo, ubicada en la región Cusco.

Urteaga ha propuesto una mesa de diálogo “para poder escuchar los reclamos de los cusqueños”.

Los dos puntos principales que se exigen son: fin del contrato con Joinnus y su propia salida de ese ministerio.

Asimismo, pidió dejar de lado las medidas de fuerza para que se instale mañana ese grupo de trabajo y se busque las soluciones a los álgidos problemas.

El gobernador regional del Cusco, Werner Salcedo, se reunió ayer con los ministros de Comercio Exterior y Turismo, Juan Carlos Mathews; de Cultura, Leslie Urtega; y del Ambiente, Albina Ruiz.


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