Los fuertes vientos huracanados sorprendieron a los ciudadanos en Tingo María. Los árboles se caían y los techos de calamina salían volando por el aire hasta terminar en medio de las calles.

A los pocos minutos de registrado este fenómeno climático, una torrencial lluvia inundó varios sectores de la ciudad, por lo que, para evitar corto circuitos, el fluido eléctrico fue suspendido.

Defensa Civil continúa monitoreando las zonas afectadas para brindar la ayuda necesaria.

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